No conocemos si antes o después; de lo que sí estamos
seguros es que el hermanamiento entre Sant Celoni y Bornos llegará, pues así lo
predestinó el primer bornicho que empleó el “bo”, vocablo que en catalán
significa “bueno”. Un homenaje recíproco que ha dejado de pasar desapercibido.
Ambos pueblos se beneficiarían, la influencia mutua en
diferentes campos sería enriquecedora. Unas primeras experiencias con resultados
exitosos animan a pensar así. Los embutidos bornichos ofrecidos en la Fira
d’entitats y la Gazpachada han seducido y gustado a los oriundos celonins. Y el
espíritu emprendedor y desarrollista de los habitantes de Sant Celoni han
contagiado su inquietud a sus vecinos pancipelaos.
Y esta contribución es tan esperanzadora… Ilusiona
muchísimo comprobar el ánimo y las ganas que los bornichos residentes en Sant
Celoni depositan en todo proyecto que persiga la promoción y progreso de su
pueblo. No temen al “qué diran”, abandonaron en un entorno activo la pasividad
y el conformismo que llevan décadas castigando a Bornos…
Reconforta defender nuestro pueblo a más de mil
kilómetros de distancia. Pero queremos sentirlo más cerca e intensificar el
contacto con nuestros paisanos. Por ello desde la ASBOCA no cejaremos en
nuestro deseo de materializar el hermanamiento. Sirva este texto para recordar
que no olvidamos tal objetivo.
José Bermúdez Pérez
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