CARITAS MERECE MEJOR TRATO POR PARTE DE LOS OBISPOS.

En estos días, se está hablando (entre los partidos de izquierda, claro)  del agravio comparativo que hay con respecto a los bienes de la iglesia  católica  y los de  otras instituciones y personas particulares  a la hora  de  pagar el impuesto de bienes e inmuebles (IBI) y que la iglesia no paga por  sus miles de casas,  pisos  y fincas que poseen repartidas por todo  el país, donados la mayoría de ellos,   por  beatas y beatos.  

Este patrimonio les está dando unos grandes beneficios  ya  que la gran mayoría de estos inmuebles   los tienen alquilados, por tanto, hay una actividad económica que no paga impuestos.

La respuesta del “glorioso”   Rouco  ha sido: “que el importe de ese impuesto  repercutiría  en la acción social de Cáritas”.

Es decir: “si  nos  hacéis  pagar impuestos,  nosotros lo descontaremos en la ayuda  a los pobres a través de Cáritas”.  

 

La pobreza en España ,está aumentando a lomo de la crisis, y gracias a instituciones como Cáritas,  Cruz Roja  o los  comedores sociales de los Ayuntamientos,  hoy comen muchas persona cada día ,  pero últimamente se están viendo sobrepasados por la gran demanda de ayuda.  

Solo el hecho de responder con esta  amenaza  por parte de este  “católico”   tan...  representativo, por llamarlo suavemente,   da  asco.

Pero es que además, miente.  Cáritas no se sustenta de los beneficios fiscales que tiene la iglesia,   ni  se sustenta   con el dinero de su patrimonio  que es inmenso, ni de las grandes  donaciones de la iglesia, para que amenace  con  hacer recortes con un dinero que le son donados  para paliar las miserias de las gentes a través de una institución  “afiliada”   a su iglesia.

El presupuesto de Cáritas,  (unos doscientos millones al año)  viene de donaciones privadas,  de empresas,  de cajas de ahorros,  de los presupuestos de la autonomías,  de los   ayuntamientos  y de la famosa casilla para asuntos sociales del IRPF  (0,7%)  eso supone el 99 %   el resto , el 1% es lo que dona la Iglesia católica.

A parte de ese 1%,  el apoyo más directo de la iglesia a   Cáritas es albergarlas en sus  locales en algunos municipios,  en otros, son de los ayuntamientos.

Bien es cierto que  está administrada y apoyada por católicos de bases, y  no católicos  (seculares),   pero que la mayoría de ellos  nada tienen que ver con   Rouco y sus bien alimentados obispos

El gran Rouco,  ha  desaprovechado una buena ocasión para agradecer a los contribuyentes   (ahora que estamos en plena campaña de declaraciones de rentas)   el  apoyo al  sostenimiento de  éstas asociaciones  caritativas  y mostrarse solidario con las personas que necesitan éstas ayudas,  por ejemplo, anunciando un aumento de su aportación a Cáritas.

No pierden ocasión de sacar la bandera de Cáritas  y atribuirse el merito que esta institución tiene cada vez que alguien les  critica por los beneficios que reciben  sin ningún control por parte de las autoridades económicas.  

Mi pregunta es:   ¿Ha sido alguna vez  la cúpula de la iglesia católica española solidaria con los pobres?

¿Por qué no pueden pagar impuesto como todo el mundo?

¿Han olvidado lo que dijo su jefe de   “al Cesar lo que es del Cesar (hacienda)   y a Dios lo que es de Dios?

Recientemente  el  Papa se quejaba de la falta de vocación religiosa y laicismo que recorre Europa. No hace falta quebrarse mucho la cabeza para saber dónde está el motivo.

Me gustaría que alguien me mostrase algunas fechas en la historia reciente de nuestro país en la  que la cúpula de la iglesia católica   ( no individuos  aislados)   haya  protagonizado algún hecho relevantes  en defensa de la clase más necesitada, ahora tienen una buena ocasión de levantar la voz y dar la cara, hay motivos más que suficiente,  que no sea solo para gritar por las calles en contra del aborto, los gay o  por la educación para la ciudadanía. 

Yo solo conozco el apoyo sin fisuras  que siempre le han dado a los dictadores y a los poderosos de este país, y de eso sí que tenemos fechas y épocas  muy relevantes en nuestra historia reciente.

Saludos.

Perico Calderero